Mágicos

Hay magos y magas. Claro que los hay. Yo los veo. Me enseñó uno de ellos una vez: "tú ves la mentira y ves la verdad". Los magos reales son Verdad. Si es invento, una maga lo sabe. Solo de ver, una se da cuenta. Aunque ellos mismos aún no lo sepan. Los magos y las magas vienen a transformar. Su lenguaje es el arte. Pero no el de las vidrieras, el de la Verdad. Su palabra es arte, su vara es permitirse estar. Los demás cambian con su presencia. Para bien o para mal. Aunque no diría eso un mago, ya que no distingue entre lo que es bueno y lo que está mal. Los brujos saben que todo los habita y vive en su tesoro Dios y la Oscuridad. Hay magos que hacen trucos con sus sentimientos de tinieblas y el mejor mago es el que los sabe transformar. Esa es su alquimia. Podrán pensar que todos somos magos, yo lo pensé así alguna vez. Pero no. Eso no es real. Todos tienen magia y solo algunos la saben usar. Otros construyen, otros mandan, cuidan, apuestan y ganan, otros enseñan, protegen y dan. Los magos andan libres como El Loco. No se les puede imitar. Con solo verlos, de lejos, los miro y pienso: allá va. Bienvenido. Otro mago que acaba de despertar.